martes, 31 de marzo de 2009

Santuari Mare de Deu del Coll d'Osor

Como lo prometido es deuda ahi va la foto prometida de la excursión del 22 de Marzo, domingo soleado, estupendo día para salir a andar... no como hoy.

Pollo con verduritas

Venga, hoy que llueve y hace más frio del esperado es un buen día para poner al día esta bitàcora. Y que mejor manera que compartir las últimas recetas.

Esta que os contamos ahora fue la de la comida del domingo que hizo un día pocho, por la noche llovió, y no nos permitió salir de excursión como el anterior. Ah, que no os hemos contado la excursión del dia 22? Eso es porque entre ayer y hoy hemos migrado de Ubuntu a Debian "Lenni" y mira tu por donde el texto que teniamos preparado esta en Word Office 2007 y Debian no lo reconoce. No os preocupeis, luego os colgamos una foto y en cuanto tengamos otro momento ya llegará el relato.

Ahora vayamos por la comida.

Ingredientes:

Un pollo limpio entero
Una manzana
Un par de patatas
Un par de puerros
Un par de cebollas tiernas
Un par de calabacines
Un pimiento rojo
Un par o tres alcachofas
Un par o tres zanahorias
Caldo o agua

Cortamos la verduras en palitos y las ponemos en una bandeja alta apta para el horno. Salpimentamos. En el interior del pollo ponemos sal, pimienta y algo de romero en polvo y la manzana. Cubrimos las verduras con un caldo claro de verduras o de pollo, nosotros utilizamos el socorrido truco del cubito Maggi. Untamos el pollo con aceite y lo colocamos sin miramientos encima de las verduras, bien acomodado.



Y lo horneamos lentamente, unos 150º -180º según la prisa o el hambre que haya, hasta que està bien doradito y la piel cruje. Tendremos que ir mojando con el caldo para que no se nos quede seco el pollo.

Una vez està bien hecho, el palito que clavamos en la pechuga sale limpio, servimos por un lado las verduras y por el otro el pollo troceado todo regado con el fondo de cocción.



No teniamos a nuestro probador oficial, que es oficial de los sabados, pero aseguramos un resultado excelente, el pollo no estaba reseco y las verduras deliciosas.

Tartaletas con berenjena y pesto

Abandonada teniamos la sección de cocina en las ultimas semanas aunque eso no significara que no se cocinaba nada. Sencillamente hubo un problema técnico de mala solución, tan mala que aun està por solucionar. Nuestra fotografa aficionada le cogió el gusto a hacer las fotografias de lo cocinado con el mobil. Pero al migrar a Ubuntu el ordenador no reconoce el mobil y he ahi que las fotografias de estupendos muffins se quedaron allí, nuestra cocinera, fustrada por no poder ofrecer las fotografias decidió que ya los repetiria y fotografiaria con la camara.

Muffins no pero este sabado decidió arriesgarse con unas tartaletas de hojaldre, para aprovechar un resto que se congeló no hacer mucho. Una buena pasta de hojaldre la del Eroski que no recordamos para que se compró en origen pero que este sabado fue utilizado para las tartaletas. Nuestro afamado pinche estuvo un buen rato para que tomaran forma de tartaleta.


Se hizo una tartaleta por persona, para probar.

Ingredientes:

Hojaldre
Una berenjena en rodajas
Salsa pesto
Queso Mozarella fresco
Aceite
Jamon para decorar

El proceso es muy sencillo.

Se untan las rodajas de berenjena en aceite y se frien un poco por cada lado. La tartaleta la horneamos brevemente para que suba y coja forma aunque pensamos que tambien se podrian hacer con los hojaldres que ya venden preparados en nuestro supermercado más cercano. En el interior colocamos una rodaja de berenjena, un par de rodajitas de la Mozarella, nosotros la teniamos en forma de bolita, un poco de salsa pesto, otra rodaja de berenjena y lo rociamos con aceite.


Ponemos las tartaletas al horno, unos 5 minutillos a 180º y cuando esten, si tienen un aroma apetitoso y el probador oficial de la casa se las mira con avidez es que ya estan en su punto, los sacamos y aún en caliente colocamos un trocito de jamón encima.



Resultado: Delicioso. Hasta el probador, al que no le gusta especialmente la berenjena, se chupó los dedos y preguntó porque no habiamos hecho más.

Por cierto, os habeis fijado en la superficie negra sobre la que están las tartaletas en la bandeja del horno? Es un papel para horno, tipo silk pat, que encontramos de oferta, 2 euros aproximadamente, en un supermercado Aldi que tenemos en Granollers, en el Poligono. Una gran compra, de verdad, olvidaos del papel de plata y sus roturas inesperadas y de las bases de la pizza pegadas a la bandeja.

miércoles, 25 de marzo de 2009

El Castell de Burriac

Esta breve crónica de lo que debía ser un agradable paseo por el Maresme el dia 8 de marzo, se vió apartada temporalmente de aparecer en el blog por un desafortunado incidente que nos ha llevado de cabeza toda la semana.

La mañana pintaba magnifica, algo de calor para la época y buena compañía para una excursión breve y ya conocida inlcuida la ascensión al Castillo de Burriac que, pese a no tener una gran altura, nos ofrece unas magnificas vistas de todo lo que tiene a sus pies. La ciudad de Mataró, Argentona, los campos de cultivo y los hinvernaderos de Vilassar de Mar y, puesto que el dia era claro, se podía entrever alla a lo lejos la silueta de la Torre Agbar de Barcelona. Todo gracias a la ventolera del jueves anterior que limpió todo el ambiente.



La excursión transcurrió tranquilamente, sin sobresaltos, dado que goza de una subida bastante empinada y que, si no se tiene demasiada costumbre de andar por la montaña, hay que acometer con calma. El camino, básicamente pista de tierra no apta para vehículos a motor, es muy transitado por familias con niños que buscan un lugar bonito donde pasar la mañana. Aquí y allá, una vez en el castillo, se ven grupitos de personas dando buena cuenta del almuerzo.

El castillo conserva un torreón en bastante buen estado – aunque no se puede acceder a él de ninguna forma - y alguno de los muros cosa que unido a su altura sobre la riera de Argentona, hace que podamos avistarlo desde el mismo momento en que salimos del túnel de Parpers si venimos desde Granollers o desde bastante antes de Vilassar hasta llegar al desvio de Cabrera casi a las puertas de la ronda de Mataró.

Después de la subida al castillo y de disfrutar de sus vistas la idea era transitar por alguna de las pistas de los alrededores y buscar un lugar tranquilo donde sentarnos y hacer un pic nic consistente en unas tortillas y una ensalada. Pero el coche nos jugó una mala pasada y rompió la pieza de la prensa del embrague y se tuvo que llamar a una grua. No tenemos más que buenas palabras para describir la actuación del seguro, Regal, y la celeridad en llegar la grua, probablemente, nos dijo el gruista, porque era la hora de comer y pocos avisos tienen a esa hora. Eso si, como las gruas no te atiendes en las pistas de tierra tuvimos que bajar por nuestros medios, que no eran muchos ya que el coche bajó en punto muerto una vez convecimos, no de buenas manera, al cambio de marchas de sacar la primera.

Acabamos comiéndonos las tortillas en el Parque de la Serreta de Cardedeu, población vecina de la nuestra donde hacemos toda nuestra vida social y a la sazón tenemos el taller mecánico de confianza. El Parque de la Serreta es una buen lugar donde dar un paseo e incluso descansar al sol, siempre y cuando no bufe aire ya que està bastante aislado y cualquier brisilla se convierte en viento allà arriba.

jueves, 5 de marzo de 2009

Paseo por el parking

Despues de tantos dias sin dar señales de vida esta redacción espera que nadie piense que nos quedamos en el Rocacorba para nunca más volver. No fue asi, la cronica fue escrita des de la comodidad de nuestra mesa de trabajo y el blog fue abandonado temporalmente por un cumulo de circunstancias que nos han llevado a migrar a Ubuntu. Sin embargo otro cumulo de circunstancias diferentes nos ofrecen la oportunidad de disfrutar de las tardes para nuestro solaz lo que, con toda seguridad, nos dara la oportunidad de llevar más al dia este blog.

Para empezar, y al hilo de las segundas circunstancias, tenemos un poema que ofreceros. Respondiendo a una petición del Comandante de Campo Cohen os ofrecemos un cúmulo de despropositos en forma de poema que puede resumirse sucintamente en: como ofrecer una imagen aproximada del parking de un edificio de oficinas de la ciudad de Barcelona.

Esperamos vuestros comentarios y que seais benevolentes con la autora que hoy se lanza a dar a conocer por primera vez uno de sus poemas.

Pasillos en obras:
mugre en las esquinas,
polvo en los rincones,
suciedad en las grietas.

Escaleras ruidosas:
el ulular del viento,
un aspirador de obra
mortero deshecho.

Parking silencioso
una radio lo rompe,
su sonoridad espanta
el frio de los coches.

Ascensores viejos:
chirrian al llegar,
golpean piezas sueltas
riesgo en cada viaje.

Edificios mudos
llenos de papeles
que dicen de todo
pero no cuentan nada:

Desencanto en aquel rellano,
tristeza en el entresuelo,
quiebra en el cuarto,
despidos en el sexto.

Un mundo de negocios
con escaleras polvorientas
y pasillos sucios
de ascensores viejos.

Barcelona
11 de Febrero de 2009